Tardes sin puñaladas de relojes.
Tiempo suspendido de empleo y sueldo. Mar pintado con el color cian de un
estuche de ceras. Besos siempre nuevos. Helados de fresa de los campos de
fresas para siempre. Cuerpos desnudos
sobre suelos frescos. Miradas que se beben con cañita. Olvido no olvida, es
más, lo recuerda en demasía. Recuerda su viaje a Agua Amarga, la textura de la
arena o el olor de la brisa marina como si estuviera viajando, tocando y
oliendo en este mismo momento. Sobre todo recuerda a su amor de verano, con la
viveza de mil alfileres clavados en su estómago. Su amante sí ha olvidado a
Olvido, con la facilidad del que ha querido solo a medias y puede borrar sin
pesar las muchas fotos que entonces necesitó tener de ella. Casualidad de tiempo
y lugar, un fresco día de octubre, el recuerdo de Olvido y el olvido de su
amante se encuentran por la calle. Se saludan con cortesía. "Adiós,
Olvido", dice él. Y de pronto recuerda y la vuelva a amar con locura.
"Adiós, recuerdo", dice ella. Y entonces Olvido, por fin, le olvida. Un
justo final para la historia, de entre todos los finales. Pero hay que recordar
que ese día era tormentoso y toallas descoloridas, sombrillas y palabras gusta
de llevárselas el viento.
Participación en el Concurso de Zenda Libros #historiasdeviajes
6 comentarios:
Coincidentes viajeros fugaces generando historias que se recuerdan distintas.
Un gusto leerte, Mar. Muy buen relato. Suerte.
Muchas gracias por acercarte a comentar Juan Manuel. Un saludo.
Muy lírico y con un punto de amargura todo el relato que deja ese regusto al final.
Gracias Miguel Ángel, todos los finales de verano están llenos de recuerdos y olvidos. Un saludo.
Mar, un relato muy melancólico. La buena noticia es que el final de este verano está todavía por escribir, que los recuerdos sean buenos y los olvidos los deseados.
Yo también participo en el concurso de Zenda, pero con un estilo un tanto distinto. Suerte.
https://elpedrete2.blogspot.com/2020/07/zenda-carretera-y-manta.html
Muchas gracias por tu comentario. Me pasaré por tu Carretera y manta. Un saludo y suerte...
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